Ingredientes:
6 huevos grandes
180 g de azúcar
150 g de harina de trigo
1 cucharadita de polvo de hornear
1 pizca de sal
Ralladura de 1 limón (opcional)
1 cucharadita de extracto de vainilla (opcional)
Preparación:
1. Precalienta el horno a 180°C (350°F). Engrasa y enharina un molde para pastel redondo de aproximadamente 22 cm de diámetro.
2. En un bol, tamiza la harina junto con el polvo de hornear y la pizca de sal. Reserva.
3. En un bol grande, bate los huevos junto con el azúcar hasta que la mezcla esté pálida y haya triplicado su volumen. Esto tomará aproximadamente 8-10 minutos con una batidora eléctrica a velocidad alta.
4. Si estás usando ralladura de limón y extracto de vainilla, agrégalos a la mezcla de huevos y azúcar y bate un poco más para combinar.
5. Añade la mezcla de harina tamizada poco a poco a la mezcla de huevos y azúcar, usando una espátula y movimientos suaves y envolventes. Asegúrate de no sobremezclar para mantener el aire en la masa.
6. Vierte la masa en el molde preparado y alisa la superficie con la espátula. Hornea en el horno precalentado durante 25-30 minutos, o hasta que un palillo insertado en el centro del bizcocho salga limpio.
7. Deja enfriar el pandispan en el molde durante unos 10 minutos. Luego, desmóldalo y colócalo sobre una rejilla para que se enfríe completamente.
8. Puedes espolvorear azúcar glas por encima del pandispan antes de servirlo para un toque extra de dulzura y presentación.
9. Este bizcocho es ideal para usar como base en tartas y pasteles, ya que es muy ligero y esponjoso.