Ingredientes
Para la crema:
1 litro de leche entera
100 gramos de azúcar
100 gramos de harina de maíz (maicena)
1 rama de canela
Cáscara de 1 limón (sin la parte blanca)
1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
Para empanar y freír:
Harina de trigo
2 huevos
Aceite de girasol (o de oliva suave) para freír
Azúcar y canela en polvo para espolvorear
Preparación
1. En una cacerola, calienta 750 ml de leche junto con la rama de canela y la cáscara de limón. Deja que hierva a fuego lento durante unos 10 minutos para que la leche se infusione con los sabores.
2. Mientras tanto, en un bol, mezcla los 250 ml restantes de leche con la harina de maíz, asegurándote de que no queden grumos.
3. Retira la canela y la cáscara de limón de la leche caliente. Añade el azúcar y mezcla bien.
4. Incorpora la mezcla de leche y maicena a la cacerola, removiendo constantemente a fuego medio hasta que espese. Esto puede tardar unos 10 minutos. Debes obtener una crema espesa y homogénea.
5. Si decides añadir esencia de vainilla, este es el momento.
6. Vierte la crema en un molde rectangular o cuadrado previamente engrasado (para que la crema tenga un grosor de unos 2 cm). Deja que se enfríe a temperatura ambiente y luego refrigera durante al menos 4 horas (mejor si es toda la noche) hasta que esté bien firme.
7. Una vez que la crema esté bien fría y firme, desmolda y corta en cuadrados o rectángulos de tamaño similar.
8. Pasa cada pieza por harina y luego por huevo batido, asegurándote de cubrir bien todos los lados.
9. Calienta suficiente aceite en una sartén a fuego medio-alto.
10. Fríe los trozos empanados hasta que estén dorados por todos lados. No pongas demasiados a la vez para que no baje la temperatura del aceite.
11. Retira y deja escurrir sobre papel absorbente.
12. Mezcla azúcar con canela en polvo y espolvorea sobre los trozos de leche frita.
13. Sirve caliente o a temperatura ambiente.
