Ingredientes:
1 lata de leche condensada (aproximadamente 397 gramos)
2 tazas de crema para batir (500 ml)
1 cucharadita de extracto de vainilla
Preparación:
1. Asegúrate de que la crema para batir esté bien fría antes de empezar. Puedes ponerla en el congelador durante unos 10-15 minutos.
2. En un tazón grande, bate la crema para batir con una batidora eléctrica a velocidad alta hasta que forme picos firmes. Esto puede tardar unos 3-5 minutos.
3. Reduce la velocidad de la batidora a baja y agrega lentamente la leche condensada mientras sigues batiendo.
4. Añade el extracto de vainilla y mezcla hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados.
5. Vierte la mezcla en un recipiente apto para el congelador. Cúbrelo con una tapa o con papel film para evitar que se formen cristales de hielo en la superficie.
6. Coloca el recipiente en el congelador y deja que se congele durante al menos 4-6 horas, o hasta que el helado esté firme.
7. Una vez que el helado esté completamente congelado, saca el recipiente del congelador y deja que repose a temperatura ambiente durante unos minutos para que sea más fácil de servir.
8. Usa una cuchara para helado para servirlo en porciones.